¡GUÁCATELA, QUE ESTUVO BUENO!
En la vida escolar nuestros/as alumnos/as viven hechos inolvidables y
cada uno de ellos tienen características muy especiales y que dejan huellas
indelebles.
Pero si hay una experiencia maravillosa que puede vivir un alumno, es
aquella oportunidad que tiene de
conversar con el autor del libro que leyó y que tanto le gustó. Esa experiencia se
transforma en un aprendizaje muy significativo. Es una vivencia que queda
marcada a fuego, especialmente en los alumnos de enseñanza básica.
Es lo que vivieron nuestros/as alumnos/as los días 2 y 3 del presente de
cuatro escuelas de la comuna: Escuela La Villa, Escuela Alto Miraflores,
Escuela Las Mercedes y la Escuela de La Cuesta Lo González. Fue allí donde se
desarrolló esta iniciativa cultural emanada de la Ilustre Municipalidad por medio de la Biblioteca Municipal que
dirige magistralmente la Tía Tity o Ernestina
con el apoyo del DAEM. Traer nuevamente a un escritor de
literatura infantil de la talla de Mauricio Paredes para un encuentro con los
alumnos, se constituye en un hecho de mucha relevancia, y si a eso le agregamos
la simpatía, el carisma, la sencillez y por sobre todas las cosas el sentido del humor de Mauricio, forman una gran instancia
de aprendizaje.
Fue un momento mágico, sin lugar a dudas, ver cómo los niños con miradas
vivaces y con una atención increíble pudieron sostener un “tú a tú”, un cara a cara con el autor del
libro que habían leído. Formularon preguntas, agregaron comentarios, se rieron,
lo pasaron bien. Disfrutar con un libro, alcanzar eso hoy en día, es difícil, pero
no imposible, así quedó demostrado.
En esta vivencia, pude comprobar una vez más mi tesis, que los libros no
fueron ni serán escritos para que nosotros
los profesores desarrollemos pruebas formulando preguntas que están muy cerca de lo absurdo. Con la
aplicación de esas pruebas, lo único que hacemos es alejar más a los
alumnos del mundo de los libros. No
puede ser que nuestros /as alumnos/as lean un libro para una prueba y nunca más
supo de él. La lectura de un libro no debe transformarse en un esfuerzo inútil. Ningún libro debe ser
intranscendente y de su lectura debe quedar siempre un aprendizaje para la
vida.
Mi invitación es desarrollar
estrategias que motiven a los/as alumnos/as a leer por grado y no por
obligación y que sepan que no habrá “el control de lectura” sino propuestas como por ejemplo, pintar lo
leído, dialogar con los personajes, crear crucigramas, sopas de letras, diseñar
un diario del libro, etc, etc, teniendo
el cuidado de no caer en el activismo o el hacer por hacer. Estoy tan seguro
que habría un cambio fundamental de los alumnos frente a la lectura. No es
posible seguir con los “famosos controles de lectura” (¿Para
comprobar si lo leyó o si lo comprendió?) No es posible seguir con las pruebas
de libros si en muchos casos, el alumno que no lo leyó obtiene mejor nota del
que sí lo leyó… es una injusticia del porte de una catedral. Es un gran desafío
que con la conocida creatividad de TODOS los profesores (el problema de la
lectura no es una responsabilidad exclusiva de los profesores de lenguaje) veremos con singular asombro
cómo los chicos se van sumado a la república democrática del buen lector. Te
invito a ser parte de este gran desafío.
También hubo en la biblioteca, una interesante tertulia literaria con
Mauricio, donde se contó con la presencia de muchos socios lectores y también
la del Alcalde Cosme Mellado, la directora de Dideco Danery Cárcamo y algunos concejales. Esta instancia nos permitió darnos cuenta que
mientras en varias partes del mundo, incluyendo Chile, hay violencia, descontentos, infamias, en un
rinconcito de Chile un grupo de
“quijotes” se congregaba para hablar de
literatura. Así es mi Chimbarongo.
Una vez más por las calles de Chimbarongo, transitó La Cama
Mágica de don Bartolo, se divisó
en medio de la neblina a Verónica,
la niña biónica, los más valientes se encontraron con Los cocodrilos mágicos de don
Bartolo, muchos niños locales le extendieron la mano a don
Macanudo y a Mi hermano gigante, mientras que La familia Guácatela se fue de compra a un taller de artesanía de
mimbre y en el camino se encontraron con
Tincuda , la comadrejita trompuda, y varios niños
aprovecharon de visitar a Los
enfermos mágicos de don Bartolo.
Una linda fiesta donde los
principales invitados fueron los alumnos y los libros.
Leer hace bien.
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Los alumnos de la Escuela 455 La Villa |
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Contacto directo con el autor del libro leído por los alumnos de la Escuela 455 |
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Un testimonio del encuentro de Mauricio con los alumnos de la escuela Las Mercedes |
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Otro momento registrado en la Escuela Las Mercedes
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En la tertulia en la Biblioteca Municipal, un momento muy ameno. Una oportunidad para hablar de libros. |
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Mauricio Paredes en la Biblioteca de la Escuela Alto Miraflores, contando sus cuentos a los alumnos
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Mauricio Paredes con alumnos,apoderados y profesores de la Escuela F-415 Cuesta Lo González en la capilla del sector. El establecimiento está siendo reparado. |